Para los más pequeños de la casa, Ikea ha diseñado este sillón con forma de oso, para que puedan jugar y también descansar, en cualquier momento. Tanto el respaldo como los brazos y el reposacabezas son regulables, para que el niño ( o sus padres) lo disponga a su gusto. Su apariencia de peluche y su confortable tacto hará las delicias de los niños, que se merecen un regalo como éste en navidad.
Es desenfundable, y se puede lavar a máquina. Por lo que es cómodo para los pequeños y también para los padres, ya que es muy fácil de mantener.
La estructura se mantiene estable gracias a la cola del osito, que actúa como tope. Pero puede regularse adaptando múltiples posiciones posibles, hasta recostarse completamente ejerciendo de colchón.
Midre 114 cm de alto, 91 de largo y tiene 9 cm de grosor.
Lo puedes encontrar en cualquiera de las tiendas Ikea por 69,90 euros.
Vía: Ikeando