«Dos hermanos mueren tras ingerir medicamentos suministrados por su madre«, noticias tan trágicas como estas, dan la voz de alarma y reabren el debate en torno al consumo de medicamentos en los más pequeños. Y la respuesta siempre es la misma, nadie debe medicar a un bebé, sin la recomendación de su médico.
Los padres no deben administrar a sus hijos sin que un médico así lo indique. Y siempre, ante cualquier duda, siempre hay que dirigirse al médico.
El mal uso de medicamentos, como la automedicación sin control médico, puede provocar daños en la salud de tu bebé y, además, el uso inadecuado de medicamentos provoca que en el futuro no sean eficaces, cuando sean necesarios.