Lunares, antojos, pecas y otras manchas son habituales en la piel de bebés y niños. Aunque hay que preguntar al pediatra sobre cada manchita con la que el bebé nace, para saber como evolucionará y si hay que «tratarla» de alguna manera, la gran mayoría son inofensivas y bastantes desaparecen a medida que el bebé crece.
¿Quieres conocer los distintos tipos de manchas en la piel del bebé?
Lunares
Se tratan de pequeñas manchas de color negro o marrón causadas por un exceso de pigmentación en la zona, que pueden estar desde el momento del nacimiento o aparecer después. Los bordes suelen estar bien definidos, y miden entre 1’5 y 2 cm de diametro. Por lo general son beningnos, pero conviene que un dermatólogo los controle, especialmente los de mayor tamaño.
Manchas de nacimiento color marrón
Se trata de manchas color marrón claro y forma irregular, causadas también por un exceso de pigmentación. Pueden localizarse en cualquier parte del cuerpo y en el momento de nacer no suelen sobrepasar el centímetro y medio de diámetro. No tiene mayor importancia si tiene menos de 3 en todo el cuerpo, en caso contrario, debes consultar un médico.
Antojos
Son manchas de nacimiento de color rojo o rosado, formados por un aumento de capilares sanguíneos. Pueden tener forma plana o profunda (manchas con relieve), los primeros pueden desaparecer entre los 3 y los 12 años, pero los segundos suelen precisar cirugía láser.
Pecas
Son pequeñas manchas marrón clarito que suelen aparecer en las zonas más expuestas al sol (nariz, pómulos, manos…), típicas de niños rubios, pelirrojos o de piel clara. Suelen aparecer entre los 2 y los 5 años y muestran una incapacidad de producir melanina de forma adecuada, por lo que a los niños pecosos se les debe proteger especialmente del sol. Más allá de eso, no tienen ningún tipo de peligrosidad.
Mancha mongólica
Se trata de una mancha plana color azul pálido, de forma triangular, y que sitúa en la zona baja de la espalda. Es una mancha de nacimiento y tiende a desaparecer en la pubertad. Es totalmente benigna.
Además, hay otras manchas típicas de los primeros días del bebé y que desaparecen a las pocas semanas del nacimiento. Son las siguientes:
- Milia: pequeños quistes blancos que aparecen bajo la nariz debido a acumulaciones de grasa en las glándulas sebáceas del rostro.
- Sudamina: manchas blanquecinas con bordes rojos.
- Eritema: pequeños puntos rojos que se producen cuando el pequeño suda mucho, debido al calor.