Aunque cada vez son menos los contagios de rubéola, gracias a la efectividad de las vacunas, aún hay muchas mujeres que tienen dudas sobre cómo se contagia o cuales son las complicaciones que puede traer al embarazo. En blogbebés te resolvemos estas cuestiones.
El contagio de la rubéola lo causa el virus transmitido por un enfermo, que lo expulsa al hablar, toser o estornudar y se transmite por el aire. Se puede contagiar desde la semana anterior a que aparezcan los síntomas, hasta incluso depués de que éstos desaparezcan. Lo más común es que si se contrae, la rubéola se pase durante la infancia. Una vez se ha superado, la persona se vuelve inmune a ella permanentemente.
Si la rubéola es contagiada a la madre durante el embarazo, y sobre todo si se produce en los tres primeros meses, provoca lesiones en el feto, al atravesar el virus la placenta. Si se produce durante el primer mes, puede finalizar en aborto. Otros problemas causados por la rubéola son las cataratas, glaucoma, defectos en el corazón, sordera o retraso psicomotor.
Si te has vacunado, no debes preocuparte ya que se trata de un método altamente eficaz. Normalmente esta vacuna se administra en dos sesiones, una entre los 12 o 15 meses y la otra a los 4 o 6 años, o a los 11 o 13 años.
Si no estás muy segura de haberla recibido, hazte un análisis de sangre para comprobar tu inmunidad. Si no la has recibido debes vacunarte y esperar tres meses antes de quedarte embarazada, porque de otra manera, la vacuna podría hacer daño al feto.