Ante la llegada de un nuevo bebé, es habitual sentir cierta ansiedad por cómo se lo tomará el hermano mayor y preguntarse cuál es la mejor manera de lidiar con eso. Los celos del hermano mayor son una consecuencia totalmente normal de la llegada de un nuevo miembro a la familia, pero es importante saber cómo actuar para minimizarlos en la medida de la posible.
La edad más díficil para los niños (en la que reaccionan peor ante la llegada de un hermano) es entre los 3 y los 6 años, pues antes de esa edad no se dan tanta cuenta de lo que ocurre, y después, al ser mayores, se involucran de otra manera en el cuidado del bebé, lo que les ayuda a sobrellevar la situación.
Una medida fundamental para ayudar al hermano mayor a querer al nuevo hermanito es avisarle con tiempo, y de manera que él pueda entender, que pronto nacerá un bebé y que será estupendo ser uno más en la familia, así, se le da tiempo para que se prepare.
¿Sabes qué más conviene hacer?
Durante el embarazo:
- Conviene avisar al hijo mayor durante el segundo trimestre y explicarle cuándo llegará su hermano (cuando empiece a hacer calor, despues de las Navidades…). También es importante avisarle si se va a quedar con algún familiar mientras estés en el hospital.
- Si hay que efectuar algún cambio importante para el hermano mayor (un cambio de habitación, dejar de ir a buscarle personalmente al cole…. ) conviene efectuarlo varios meses antes del nacimiento del bebé, o sentirá que es este quien le ha desplazado.
- Intenta no cambiar las rutinas de tu hijo, aunque este tenga que dormir en casa de los abuelos unos días.
- Hazle partícipe de la espera. Puedes dejarle sentir las pataditas, enseñarle la ecografía o llevarle contigo a elegir la ropita para el bebé.
- Explícale claramente lo que supone la llegada del bebé, que tendrá un hermanito con el que jugar (aunque no rápidamente) y que te gustaría que te ayudase a cuidarlo (en la medida de lo posible). Haz que se sienta importante por ser «mayor».
- Recuérdale que también hubo un momento en el que se le esperaba a él, enseñándole fotos de tu embarazo anterior y de sus primeros días.
Cuando el hermanito llega a casa:
- Sigue dedicándole un tiempo en exclusiva, cada día, a tu hijo mayor.
- Pídele a los familiares que moderen su entusiasmo ante el pequeño.
- Refuerza todo lo que haga tu hijo para cuidar a su hermanito, enseñándole canciones de cuna y pidiéndole que te ayude a bañarlo o dormirlo -en función de su edad, claro-.
- Trata de no modificar sus rutinas diarias.
- Respeta sus sentimientos y no trates de forzarle. La mayoría de los niños se sienten culpables porque saben que deben querer al bebé, pero les cuesta. No digas nada que aumente su sensación de culpa, tratando de mostrarte comprensiva con él e intentando reforzar su seguridad en sí mismo (elogia todo lo que haga bien).
- Mantén tus criterios educativos y evita consentirle demasiado o se aprovechará de la situación.
¿Cómo has preparado tú a tu hijo para la llegada de su hermanito? ¿Cómo se lo ha tomado?
