La hinchazón en el embarazo es un fenónemo muy habitual, que se ve agravado con el calor del verano y que puede resultar bastante molesto. Piernas cansadas, facciones redondeadas, sensación de pesadez…¿te suena?
La hinchazón se produce como consecuencia de una retención de líquidos y grasas, causada por los cambios hormonales y fisológicos naturales del embarazo, y que desaparece una vez que se da a luz.
Pero que sea normal no quiere decir que no podamos hacer nada para minimizar el problema. Aquí te dejo unos truquillos para combatir la hinchazón durante el embarazo.
- Sigue una dieta rica en agua, para que actúe como efecto drenante sobre el cuerpo.
- Toma alimentos ricos en fibra y evita aquellos con muchas grasas, azúcares o sal.
- Puedes tomar alimentos con un ligero efecto diurético como el té verde o el agua mineral, pero nunca tomes medicamentos diuréticos sin que te lo indique tu médico.
- Da paseos a lo largo del día, moverás las piernas, reactivarás la circulación y te sentirás menos pesada. Es conveniente evitar pasar mucho tiempo sentada o parada de pie.
- Intenta mantenerte en lugares frescos, evitando -en la medida de lo posible- las altas temperaturas.
- El drenaje linfático manual y la presoterapia pueden ayudarte a combatir la retención de líquidos, ya que ejercen un masaje sobre el cuerpo que activa la circulación sanguínea y favorece la eliminación de toxinas.
Aunque la hinchazón durante el embarazo no suele revestir gravedad, hay señales de riesgo que pueden indicar que estamos ante un problema mayor. Si aparece de forma repentina, está asociada a una presión sanguínea elevada, o se acompaña de dolores de cabeza severos, mareos o visión borrosa, debes consultarlo con un médico rápidamente.