Si estás planeando tener un bebé, puedes aumentar las probabilidades de que tu hijo nazca sano tomando algunas medidas antes de concebirlo. Lo primero que debes hacer es recurrir a tu médico para realizar un chequeo preconcepcional. Él te dará todas las pautas necesarias para que tu pequeño venga al mundo sin problemas.
El examen previo al embarazo es muy importante, ya que a través de este reconocimiento, podrás, en primer lugar, asegurarte de que te encuentras en el estado óptimo de salud para concebir a tu hijo.
Tú médico se encargará de proporcionarte la información necesaria con respecto a los hábitos saludables que debes seguir para que todo marche bien. Guiará tu alimentación, el peso saludable, y te informará sobre aquellas prácticas nocivas para el desarrollo del bebé, como el tabaco o el alcohol. Además, puede identificar y tratar algunos trastornos de salud, como la hipertensión o la diabetes, que podrían añadir riesgo al embarazo. Se asegurará de que tienes las vacunas pertinentes, y de que los medicamentos que puedas necesitar sean completamente seguros para el embarazo.
Si sigues sus pautas, las probabilidades de que tu hijo nazca sano aumentarán considerablemente.