La obesidad infantil, aunque más común de lo que podamos creer, es un grave problema que se debe tratar de manera directa a fin de ayudar a que nuestros hijos no sufran debido a ello. Un exceso de peso en la niñez puede producir problemas irreparables en el crecimiento de la infancia o desencadenar problemas futuros que pasarán factura a los niños una vez hayan crecido y pasado los años.
El consumo de una dieta no equilibrada, excesiva en materias grasas, así como la reducción del esfuerzo físico, son causas habituales de un peso elevado por parte de los niños. En los últimos años la sociedad ha tendido hacia posiciones más estáticas, menos físicas, tanto en los adultos, como en los niños, y esto es algo que tiene muy malas consecuencias.
Los niños de las últimas décadas, especialmente con la expansión de internet, tienen una menor tendencia a salir fuera de casa para jugar con sus amigos haciendo esfuerzos físicos. El impacto es similar al que décadas atrás tuvo la llegada de los videojuegos, pero a gran escala, dado que ahora el contacto con los amigos se puede mantener online sin necesidad de mover un dedo.
Es importante ayudar a que los niños tengan una dieta equilibrada y motivarles a realizar el ejercicio necesario a la hora de desarrollarse físicamente de una forma adecuada. Para ello tenemos que cuidar, de base, los alimentos que consume el niño. Tanto si queremos que reduzca peso por tener exceso, como si lo que no queremos es que engorde demasiado, es fundamental proporcionarle una dieta que esté equilibrada. En este sentido es recomendable mantener un menú común para todo el entorno del hogar y que este cumpla con los requisitos de una buena dieta.
La dieta contra el sobrepeso tiene que estar dentro de las calorías que necesite el niño y contar con todo tipo de alimentos, asegurándonos de que tiene todas las materias necesarias en este aspecto. Así mismo, debe estar combinada con motivación para realizar esfuerzo físico, aunque sea en la misma casa sin salir del hogar.
Los mencionados videojuegos se han convertido, en los últimos años, en una forma muy recomendable de crear motivación. Para ello hay juegos deportivos y de fitness que pueden ser muy útiles.
Para conseguir que el niño haga deporte también podemos motivarle al ofrecerle que vea una película o programa de televisión mientras corre delante de la televisión. Es un buen sustituto al gimnasio, lo que resulta excesivamente grande, pero es una idea que puede ser beneficiosa. Un niño con un peso equilibrado tendrá mejor salud y evitará problemas derivados del sobrepeso.