Recuerda que los alimentos prohibidos no dejan de serlo en Navidad.
No tomes alimentos crudos, como el pescado poco cocinado o crudo, tampoco debes consumir embutido, cafeína, alcohol, etc. Recuerda que no te conviene abusar de los azúcares, la sal y las grasas saturadas.
Ten cuidado con los productos de elaboración casera así como las salsas ya que si no están bien elaboradas pueden provocar intóxicas. En cuanto al marisco, no hay restricciones, aunque se debe tomar con moderación, puesto que se ha demostrado que consumido con moderación es beneficioso.
- Carnes poco hechas o con zonas rojas
- Ahumados
- Carpacios
- Pescados preparados en vinagre o marinados
- Pescados crudos o poco hechos
- Marisco crudos o poco hechos
- Embutido
- Quesos que no sean pausterizados
- Patés
- Alcohol
- Café, té y refrescos de cola
Como ya sabes los alimentos crudos están prohibidos en el embarazo ya que pueden ser una fuente de complicaciones, por ejemplo el pescado crudo puede contener anisakis y la carne poco hecha puede ser una fuente de toxoplasmosis.
Existe también una lista de alimentos poco recomendables que no se consideran alimentos prohibidos, a menos que sufras alguna complicación durante el embarazo. Y es que hay uan serie de alimentos que no debes tomar en exceso, ya que es importante que sigas una dieta equilibrada y variada, un reto bastante difícil en Navidad, pero que vale la pena porque tu salud y la de tu pequeño está en juego.
El alcohol forma parte de los alimentos que debemos eliminar de nuestra dieta cuando estamos embarazadas puesto que está demostrado con diversos estudios que cuando una embarazada toma alcohol, llega al feto rápidamente a través de la placenta y puede provocar daños permanentes en el bebé, que se conocen como síndrome alcohólico fetal, que consiste en una combinación de defectos congénitos físicos y mentales.
El síndrome alcohólico fetal es la primera causa identificada de retraso mental, la tercera de malformaciones congénitas y el mayor causante de anomalías en los países desarrollado.
Y debes tomar con moderación y sin pasarte:
- Dulces y postres de navidad. Tómalos de forma ocasional y en pequeñas cantidades. Si sufres ciertos transtornos como diabetes gestacional, más bien deben estar prohibidos.
- Mariscos. Por el mercurio que pueda contener hay que moderar su consumo.
- Cuidado con los platos grasientos y copiosos, las salsas y las cremas porque dificultan tu digestión y aportan calorías innecesarias.
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