Comer poco los primeros meses de embarazo, podría deteriorar el desarrollo cerebral del feto. Esa es la conclusión a la que ha llegado un estudio de la Universidad de Texas en San Antonio, tras realizar una investigación con primates no humanos, cuyos resultados, en principio, consideran extrapolables a los seres humanos, ya que las fases de desarrollo cerebral son semejantes.
Los primeros meses de embarazo son críticos para la salud del feto, ya que es cuando se están formando la mayoría de las neuronas. Los que ya se ha demostrado tanto con ratas como con primates es que las madres que ven reducida su ingesta diaria en un 30%, tienen hijos con menores conexiones entre células, especialmente en el área del cerebro.
Esto apoyaría la visión habitual de que las dietas pobres durante el embarazo pueden alterar el desarrollo fetal del cerebro, lo que reduciría el coeficiente intelectual del hijo, y lo presdispondría a problemas de conducta.
Esto no quiere decir que haya que comer por 2, porque ya sabemos que el sobrepeso también afecta al feto, pero desde luego, al menos que el médico lo indique, los meses de gestación no son el momento para ponerse a hacer una dieta estricta.