La astenia primaveral también hace mella en los niños, así que si notas que tu hijo acusa cierto cansancio y tiene dificultades para seguir el ritmo habitual estos días, probablemente se deba al cambio de estación.
No hay nada de lo que preocuparse, ya que se trata de unas molestias que se pasarán en un par de semanas, pero sí conviene tomar una serie de medidas para ayudarle a sentirse lo mejor posible. Y es que la astenia primaveral se produce por un desajuste hormonal de biorritmos que también pasa factura a los más pequeños.
¿Qué puedes hacer para combatir el cansancio primaveral de tu niño?
Lo primero es no agobiarlo, si tiene el día repleto de cursos y actividades no pasa nada por liberarlo de alguna de sus tareas diarias.
Pero lo ideal es inyectarle energía, ¿cómo? ¡a través de la alimentación! Una dieta rica en frutas y verduras de temporada asegura la ingesta suficiente de vitaminas y minerales. Además, eso debe completarse con alimentos de origen animal que aportan proteínas: lácteos, carnes, huevos… Y los desayunos deben ser muy energéticos para que pueda rendir en el cole.
Por otro lado, jugar al aire libre otra buena medida para combatir el cansancio. Puede que el niño se muestre más perezoso, pero quedarse en casa no hará más que empeorar su cansancio, al dejar sus músculos debilitados. Además, correr y moverse estimula la producción de endorfinas, lo que hace que se sienta de mejor humor y con más ganas de hacer cosas.
¿Tu hijo sufre la astenia primaveral?