Los calambres en el embarazo, como las piernas inquietas, son muy habituales, y no revisten gravedad alguna, pero eso no quita que puedan resultar muy molestos. Los calambres son contracciones o espasmos involuntarios del músculo, que durante el embarazo suelen ocurrir en las piernas. Así, durante el segundo y tercer trimestre de embarazo es muy habitual despertarse tras sentir calambres en las piernas.
Pero hay cosas que puedes hacer para disminuir la presencia de los calambres en el embarazo, o al menos, mitigar el dolor una vez que han aparecido. ¿Vemos algunos consejos para evitar los calambres durante el embarazo?
No se sabe a ciencia cierta por qué durante el embarazo es más habitual sufrir calambres musculares, aunque se supone que tiene que ver con los cambios en la circulación sanguínea y la presión que ejerce el bebé sobre los nervios y vasos sanguíneos que viajan a la pierna. Además, es más frecuente sufrir estos calambres mientras se está acostada.
Antes se creía que estos calambres podían deberse al déficit de calcio y otras vitaminas en el embarazo, y aunque hoy se sabe que no es así, no está de más cuidar la ingesta de lácteos y otros alimentos con calcio, ya que son fundamentales para el correcto desarrollo del bebé.
Ahora sí, ¿vemos algunos consejos para evitar o mitigar los calambres en el embarazo?
1. Calambres en el embarazo: haz ejercicio
El ejercicio regular ayuda a prevenir los calambres. Andar, bailar o nadar, son actividades muy positivas (siempre y cuando el médico no te indique lo contrario). Caminar un rato también es muy útil tras sufrir un calambre para relajar la zona (mucho mejor que quedarte en la cama).
2. Calambres en el embarazo: estira
Conviene estirar las piernas antes de ir a la cama, especialmente las pantorrillas, pues es muy útil para prevenir calambres. Si sientes un calambre, estira también la pierna, con el talón extendido y moviendo los dedos del pie.
3. Calambres en el embarazo: no te sientes
Evita sentarte mucho tiempo en la misma posición, especialmente con las piernas cruzadas, pues es una postura que favorece los calambres en el embarazo. Evita también estar de pie parada mucho tiempo en la misma posición. Si trabajas de pie o sentada, trata de para cada hora para mover un poco las piernas.
4. Calambres en el embarazo: masajéate las piernas
Tanto los masajes como la aplicación de calor resultan muy efectivos para luchar contra los calambres. Puedes darte un baño en agua tibia antes de dormir, te relajarás tú y se relajarán tus músculos. Si tienes calambres, date un masaje suave con una toalla caliente.
5. Calambres en el embarazo: bebe
Beber suficientes líquidos es fundamental, ya que la deshidratación puede provocar más calambres.
Por último, y aunque los calambres en el embarazo no son algo por lo que a priori haya que preocuparse, hay casos en los que conviene acudir al médico. Por ejemplo cuando los calambres se acompañan de dolor frecuente o muy intenso, o si notas enrojecimiento o hinchazón en las piernas.
¿Tuviste calambres en tu embarazo? ¿Cómo los combatías?
Foto vía: lululemon Athletica