¿Tú bebé tiene flemas y no sabes cómo aliviarle? Los recién nacidos y los bebés tienen mocos y flemas bastante a menudo, aunque no estén acatarrados. Se trata de una buena señal, ya que su sistema inmune está aprendiendo a defenderse, pero también puede resultar muy molesto, pues aún no saben sonarse, ni escupir, y los más peques ni respirar por la boca, por lo que las flemas les provocan mucha incomodidad.
¿Quieres saber qué puedes hacer para eliminar las flemas del bebé?
La primera medida para ayudar al bebé a expulsar sus flemas es facilitarle un ambiente húmedo. Así, beber mucha agua ayuda a disolver mocos y flemas y a facilitar su expulsión (los pediatras cada vez están menos a favor de recetar medicamentos mucolíticos).
En la habitación podemos colocar un vaporizador eléctrico o un humidificador, y por supuesto, evitar llevar al bebé a espacios con humo. El objetivo es el mismo, hacer las flemas más fluídas.
Otra buena idea es colocar al bebé en posición semi-incorporada, para evitar que se ahogue con las flemas.
Finalmente, el uso de agua salina es muy recomendable para limpiar la nariz de mocos (y a menos mocos, menos flemas). Para eliminar las flemas de la garganta podemos utilizar una pera de extracción en la boca del bebé. Se trata de un proceso delicado que debes hacer con cuidado, con el bebé siempre tumbado de costado. Coloca la pera apretada y despacio en la boca, llegando a la parte detrás de la lengua, y suéltala lentamente, la pera aspirará las flemas.
Cuando las flemas llegan al pecho es también recomendable realizar masajes de forma suave, y mantener al peque bien abrigado en la zona del pecho.
¿Tienes otros trucos para extraer las flemas del bebé?
Foto vía: Wella691
