Bañar al bebé es un momento muy agradable tanto para el bebé como para los papás, pero algunos papás primerizos tienen miedo de hacerlo mal, especialmente cuando el bebé es aún un recién nacido.
¿Cómo debe ser la bañera? ¿Cómo me aseguro de que la temperatura es la adecuada? ¿Se me puede resbalar? Son solo algunas de las dudas que surgen en los primeros baños. Hoy quiero centrarme en la posición adecuada para bañar al bebé, que es una cuestión clave para conseguir baños seguros.
Lo ideal es colocar al bebé boca arriba, sujetando con tu brazo su cabecita, y con la mano por debajo del bracito. Así tendrá agarrada la cabeza y la espalda, evitándole al pequeño cualquier incomodidad. Mientras, con la otra mano podemos bañarle.
Comienza por la parte superior, la cabeza. Puedes usar una esponja especial de bebés para limpiar la carita, y después échale unas gotitas de jabón neutro para limpiar el pelo. Es fundamental evitar que le entre agua o jabón en los ojos.
Para aclarar el pelo puedes usar un vasito o simplemente la mano, pero controlando que el agua caiga hacia atrás, y echando muy poquito de cada vez. Una vez que se ha limpiado la cabeza habrá que pasar la esponja por el resto del cuerpo, prestando especial atención a la zona del ombligo.
También hay que ser minucioso con el secado. Lo mejor es envolverlo en una toalla, e ir masajeando al bebé hasta que quede completamente seco.
Te dejo un video en el que puedes ver el baño de un bebé en vivo y directo. En este caso, se hace sin esponja, simplemente echando unas gotitas de jabón neutro en la bañera:
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Foto vía: Flickr