Comer dos o tres raciones de verduras al día es fundamental para que los niños sigan una dieta saludable, pero conseguir ese objetivo no siempre es sencillo.
Ya hemos hablado en otras ocasiones de algunos truquillos para conseguir que los niños aprecien las frutas y las verduras y las integren en su alimentación diaria, hoy quiero continuar mostrándote algunos platos que te ayudarán a «esconder» las verduras para tentar hasta a los pequeños más repugnantes:
1. Pizzas
Añadir algunas verduritas a uno de los platos infantiles preferidos es siempre una buena manera de colar comida sana :). Por supuesto, lo ideal es que la pizza sea casera, y puedes incluir, además de ingredientes tradicionales como jamón, queso, atún, o champiñones, otras verduras menos usuales como berenjena, ruedas de tomates, pimiento, cebolla, alcachofas o calabacín.
2. Canelones y lasañas
La pasta es otro de los platos estrella entre los más pequeños, y en lasañas y canelones no resulta nada difícil incluir algunos ingredientes verdes, ya sea como complemento o como parte fuerte del relleno. Los niños pueden así, irse acostumbrando a nuevos sabores en el contexto de platos que ya disfrutan.
Algunas ideas son los canelones de espinacas, la lasaña de pisto y calabaza, los canelones rellenos de verduras, la lasaña de salmón y espárragos, o los canelones de pavo y setas.
3. Tortillas
Se trata de un plato muy frecuente, al que es sencillo añadirle nuevos ingredientes «vegetales». Las más aceptadas son las de setas, y patatas con cebolla o pimiento, pero puedes probar a incluir espárragos, espinacas o calabacín.
Te propongo la variada tortilla campestre con jamón, chorizo, pimiento y guisantes.
4. Brochetas
Cuando nos dicen «brocheta» solemos pensar en el típico pincho moruno, pero hay muchas más opciones, y a los niños lo de tomar comida en un palo como que les da un plus de diversión.
Además, se trata de un plato sencillo de preparar donde los niños pueden ayudarte a cocinar, insertando los distintos vegetales en el palo de pincho, y ya sabemos que es mucho más probable que se coman algo que han preparado ellos mismos.
Además, de jugar con los ingredientes, también puedes probar diferentes maneras de cocinar la brocheta: a la plancha, a la brasa, al horno, rehogada….
Algunos ejemplos de brochetas con verduras con la brocheta vegetariana, la de setas o la de anchoas con piña.
5. Flanes
Flanes, budins y pasteles son una forma original de enmarascar ingredientes, y de hacer platos nutritivos que parezcan postres. Permiten incluir casi cualquier tipo de vegetal y también cereales, legumbres, pescados o carnes. Por no hablar del huevo (ingrediente básico) y los lácteos. Se trata, como ves, de platos muy completos para los más pequeños.
Algunas ideas son el budin de coliflor, el soufflé de remolacha, o el pastel de pavo y verduras.
¿Con qué recetas consigues que tus hijos coman más verduras y hortalizas?
Vía: Consumer