No está desaconsejado que lleves tu bebé a la playa. Si decides pasar unas horas en la playa debes tener en cuenta una serie de normas. Lo más importante es proteger al bebé del sol por lo que lo ideal es acudir a la playa a primera hora o bien entrada la tarde, para evitar las horas más peligrosas del sol y que el peque no pase mucho calor.
Nunca debes exponer tu bebé al sol, aunque no sea intenso o esté nublado porque los bebés son muy sensibles al sol y pueden quemarse en pocos minutos.
Protege en todo momento a tu bebé del sol con la sombrilla y con la ropa adecuada que tape su piel, haz uso de gorritos y prendas ligeras. Recuerda los bebés deben estar siempre a la sombra. Y ofréceles agua amenudo para evitar las deshidrataciones.
Hasta los 6 meses no es aconsejable aplicarle protección solar por si le causa una reacción alérgica.