La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha encontrado sustancias «potencialmente peligrosas» en cuatro de los catorce pijamas infantiles que ha analizado para comprobar la presencia de productos químicos en la ropa. La organización ya ha pedido formalmente que se modifique la legislación, pero mientras tanto propone una serie de pautas de actuación.
En concreto, se buscó la existencia de ftalatos, formaldehído, tintes peligrosos, benceno y metales pesados, todas ellas sustancias que pueden afectar la salud de las personas.
De hecho, algunos de estos productos químicos pueden entrar en contacto con la piel y causar irritación o alergias, sobre todo a los niños, que son especialmente sensibles; otros pueden entrar en contacto a través de la saliva, al chupar las prendas, como suelen hacer los más pequeños.
La organización ya ha pedido formalmente que se modifique la legislación, pero mientras tanto propone una serie de pautas de actuación:
- Lavar la ropa nueva antes de ponérsela por primera vez para eliminar restos que pudieran desprenderse durante los primeros usos de la prenda.
- Usar preferentemente algodón, que es uno de los tejidos menos irritante.
- Usar un detergente líquido, incoloro y sin perfume.
- Fijarse en las eriquetas: el origen no es garantía de seguridad, pero sí tienen garantía las que lucen etiquetas europeas y Öko-test.
Si quieres tener más información entra en este enlace: www.ocu.org/map/src/363064.htmº