La fruta es un elemento indispensable de la dieta infantil, ya que aporta numerosos nutrientes y vitaminas en pocas calorías. Además, tomar fruta supone descartar otros productos menos sanos como la bollería industrial.
La fruta es uno de los primeros alimentos que se incorpotan en la dieta infantil, habitualmente con un alto grado de aceptación. Sin embargo, a medida que se van introduciendo nuevos alimentos el gusto de tu hijo por la fruta disminuye. ¿Cómo conseguir mantenerlo?
1. Elige fruta con buena presencia (que tu hijo come también con los ojos). La fruta de temporada suele ser una buena opción porque está en su punto justo de maduración. Si la fruta tiene mal aspecto, tu bebé puede recordarla como «mala» y no querer comerla en el futuro.
2. En la merienda, ofrécele la fruta antes que el bocadillo o los otros elementos, para que no llegue demasiado lleno.
3. No le des alternativas con otros productos más dulces. Si le haces elegir de postre entre un yogur de chocolate y una pera, su decisión estará clara. Mejor, dále a elegir entre pera o melocotón, sentirá que tiene poder de decisión, pero tomará una pieza de fruta.
4. Pon atención en la presentación. Una buena presentación puede hacer que la fruta les parezca más atractiva. Prueba a ofrecerle una macedonia colorida o una brocheta de frutas.
5. ¿Cortadas y peladas? Cuanto más esfuerzo nos provoca un alimento, más reacios somos a tomarlo, pero este es un truco de doble filo. Darles la fruta pelada y en trozos hará que consuman más fruta, pero en algún momento -y es mejor no esperar a los 10 años ;)- tendrán que hacerlo por ellos mismos.
6. Platos creativos. La fruta no se tiene que tomar exclusivamente como postre. Algunos platos de comida llevan frutas entre sus ingredientes y eso hará no sólo que consuman fruta casi sin darse cuenta, sino también que se familiaricen con ella.
7. La regla del 10. Los niños no aceptan naturalmente los nuevos sabores, por lo que pueden ser necesarios hasta 10 intentos para que su paladar acepte un nuevo sabor. Tú insiste (puedes dejarle claro que debe probarlo 10 días diferentes y que si después le sigue sin gustar no tendrá porque tomarlo más).
8. La edad ideal. Si tu hijo se acostumbra a tomar frutas diversas (y en general todo tipo de alimentos) temprano, mantendrá buenos hábitos alimenticios en el futuro. La edad ideal para introducir nuevos sabores es entre los 2 y los 5 años.
¿Cómo consigues tú que tu hijo coma fruta?