Con la llegada de un bebé a casa, son muchos los aspectos que debemos aprender e interiorizar. Desde gestionar la lactancia materna hasta aprender sobre rutinas de sueño o alimentación complementaria. Y entre todos ellos, el chupete es una herramienta de uso común para los bebés. Entre los beneficios de los chupetes se cuenta el hecho de que ayuda a calmarlos y entretenerlos, lo que puede resultar muy útil. Ahora bien, también es importante retirarlo a tiempo, para evitar apego excesivo, así como problemas bucales. Para saber cómo quitar el chupete de forma adecuada, debemos educarnos al respecto.
Aunque no existe ninguna técnica definida, lo único cierto es que la retirada del chupete no debe ser brusca, especialmente en situaciones de tensión emocional. En cualquier cosa, durante los días que dure el deschupete es aconsejable que los padres estén cariñosos con sus hijos con objeto de proporcionarle ese plus de relajación que antes obtenían succionando. Hoy en Blog de Bebés queremos profundizar en cómo quitar el chupete, para que puedas hacerlo de la forma más efectiva, sin generar tensión o traumas a tu bebé. ¡Acompáñanos!
¿Por qué es importante dejar el chupete?
En las próximas líneas te contaremos cómo quitar el chupete a tu bebé de la manera más efectiva, pero te preguntarás ¿por qué debo quitárselo tan pronto? Pues, hay una serie de razones por las cuales se recomienda que el uso del chupete no se prolongue demasiado. El primer motivo es que puede tener un impacto en el desarrollo dental de tu hijo: el excesivo uso de chupete o prolongarlo demasiado en el tiempo puede generar problemas como el desplazamiento de los dientes hacia adelante o la mordida abierta.
Además, usar el chupete de forma excesiva también puede interferir en el desarrollo del habla: puede generar dificultades en el niño para pronunciar ciertos sonidos de forma correcta; por ello, dejarlo a tiempo facilitará el desarrollo normal del habla y la comunicación.
¿Cuando es el momento adecuado para dejar el chupete?
Si te preguntas cómo quitar el chupete a tu bebé, es importante que tengas en cuenta la temporalidad adecuada. Cada niño es diferente, por lo que no te guíes por comentarios de otras mamás o papás. Lo que sí es importante es que estés atento a las señales que te da tu bebé, que te pueden comunicar que ya está listo para dejarlo. La primera de ellas es que tiene menos dependencia del chupete a lo largo del día, interesándose en actividades que no lo involucran. Además, aprende a calmarse y regularse de otras maneras.
En relación a la edad promedio recomendada para dejarlo, los expertos sugieren que sea entre los 12 y 18 meses de edad; es un momento en el que los pequeños se adaptan bien a los cambios, y al mismo tiempo tienen la capacidad para comprender instrucciones simples.
Estrategias efectivas para quitar el chupete
Lograr que tu pequeño deje el chupete puede ser todo un desafío, por lo que es importante que vayas a su ritmo y no lo presiones en demasía. Lo ideal es tener un enfoque gradual, en el que reduzcas el tiempo que tu hijo lo usa durante el día. Empieza limitando el chupete a las siestas y a la hora de dormir, y progresivamente ve eliminándolo del todo.
Otra buena idea para ayudarte en este sentido es utilizar métodos de distracción. Introducir nuevos juegos y actividades puede hacer que tu hijo redireccione su atención y no extrañe el chupete. Mantén su mente ocupada con libros de cuentos, juguetes o contacto con la naturaleza, y el proceso será mucho más sencillo.
Ten presente que la consistencia en las estrategias es clave para afrontar con éxito el desafío de dejar el chupete. Una vez que haz comenzado el proceso, no le des marcha atrás. Mantente sólido, pues los retrocesos pueden confundir al niño y dificultar la transición. Otro aspecto importante es que toda la familia se sume al plan de quitar el chupete y trabaje en consecuencia. Asegúrate de que todos los cuidadores de tu bebé conozcan las reglas en este sentido y las respeten. Si tu hijo recibe la misma información en todos sus entornos, el proceso será más sencillo.
Por último, otra de las claves sobre cómo quitar el chupete es entrenar la paciencia. No esperes resultados inmediatos ni aceleres los procesos de modo que generes malestar en el niño. Más bien trata de mantener una actitud positiva, alentadora y amorosa para acompañarlo en este proceso.
Cómo manejar la resistencia y el malestar
Al profundizar en cómo quitar el chupete, hay momentos que pueden tornarse complicados. Si bien hay niños que viven el proceso de modo sereno y simple, para otros puede convertirse en un verdadero trauma. Por ello, si tu pequeño muestra mucho malestar y genera resistencia con el tema, es importante que seas firme, pero comprensivo. Hazle entender al niño que es necesario dejar el chupete, de una forma cálida, amorosa y cercana. Ofrécele consuelo y apoyo, de modo que se sienta respaldado en todo momento.
Un buen consejo en este sentido es ofrecerle recompensas y elogios cuando logre pasar determinada cantidad de tiempo sin usar el chupete. Esto puede representar una gran motivación. Pequeñas sorpresas, pegatinas o alguna golosina, pueden reforzar la parte positiva del proceso de abandonarlo.
Ahora bien, si el proceso se vuelve particularmente difícil y tu hijo está experimentando un malestar muy notable, quizá lo mejor sea buscar orientación profesional. La ayuda de un pediatra o un especialista en desarrollo infantil puede ser clave para emplear las estrategias más adecuadas, que ayuden al niño a transitar esta etapa.
En definitiva, quitar el chupete es un paso importante en el desarrollo de tu hijo. Ármate de paciencia y comprensión, para que le ayudes a superar este momento de su desarrollo de la mejor manera posible. Dale el tiempo que necesite y busca ayuda profesional en caso de ser necesario. Con enfoque, consistencia, firmeza y amor, verás como pronto tu pequeño deja el chupete y avanza hacia sus nuevas etapas de crecimiento. Y si este tema llama tu atención, no te pierdas estas interesantes curiosidades de los bebés, que te ayudarán en la crianza. ¡Hasta la próxima!