Los antibióticos (y otros medicamentos) en el embarazo deben usarse siempre bajo prescripción médica, pues algunos de ellos pueden causar problemas en la salud del feto. De hecho, los antibióticos NUNCA se deben tomar por propia iniciativa, pero durante el embarazo las consecuencias pueden ser peores.
Pero, de la misma manera que algunas mujeres piensan que los antibióticos son inocuos, otras los consideran el mismo demonio. Habla claramente con el médico para que te explique todas tus dudas sobre los antibióticos que debes tomar, para ser consciente del riesgo o no de tomar los mismos. Pero piensa que de todos los antibióticos, solo unos pocos son peligrosos para embarazadas.
¿Quieres saber más sobre los antibióticos en el embarazo?
Los antibióticos suelen recetarse ante la presencia de una infección. El médico nunca te va a recetar antibióticos durante el embarazo si no está completamente convencido de la necesidad de hacerlo. Además, sabiendo que hay un embarazo por medio, siempre te va a proponer aquellos antibióticos más seguros para el bebé. Así, la mayoría de los antibióticos más habituales, como la penicilina o la cefalosporina, está comprobado que no son un problema durante el embarazo.
Hay determinados casos, normalmente de infecciones más complicadas, en que puede ser necesario usar antibióticos desaconsejados durante el embarazo. En este caso, el médico sopesará la infección y los posibles tratamientos, para dar con la mejor solución, pues no tratar la infección puede ser más peligroso que el uso de antibióticos. En todo caso, se te explicará claramente cuáles son los riesgos.
Además, en general, hay momentos en los que el uso de antibióticos puede ser más peligroso (normalmente durante el primer trimestre y últimas semanas de embarazo) que en otros.
Lo importante a la hora de tomar antibióticos en el embarazo es seguir las siguientes recomendaciones:
- Nunca tomar antibióticos sin receta.
- Recordarle al médico el embarazo (aunque lo habitual es que sea una de las primeras cosas que te pregunte, aunque aún no se note).
- Respeta la receta (tanto en los antibióticos que debes tomar como en la dosis).
- Ten en cuenta que no todos los antibióticos son malos. Pregunta al médico sobre los riesgos en el embarazo, pero si te dice que no hay ninguno, es que no hay ninguno.
- Si has usado antibióticos sin saber que estabas embarazada, no entres en pánico. Pregunta a un médico sobre los riesgos de esos antibióticos en concreto.
Foto vía: Sarah G