Pliegue nucal se llama al espacio translúcido que queda en la parte de atrás del cuello de un feto. Medir ese pliegue nucal es una de las pruebas que se realiza durante el primer trimestre de embarazo para descartar anomalías congenitas en el bebé. Esa prueba se conoce técnicamente con el nombre de prueba de translucencia nucal fetal, y es uno de los tests de riesgo previos a la amniocentesis.
¿Quieres saber para qué sirve medir el pliegue nucal y cómo se hace?
Los bebés con anomalías tienden a acumular más líquido en la parte posterior del cuello durante el primer trimestre, por lo que el espacio translúcido en el pliegue nucal se ve más grande. La prueba de translucencia nucal se realiza entre las semanas 11 y 14 de embarazo y mide el grosor de ese pliegue nucal translúcido para detectar si hay riesgo de anomalías, como síndrome de Down o problemas cardíacos congénitos.
Para medirlo, el ginecólogo simplemente examina una ecografía donde mide el grosor de la zona del pliegue nucal. Cruzando esa información con el momento exacto de gestación en que te encuentras, el médico puede determinar si tu bebé tiene un mayor o menor riesgo de alteraciones cromosomáticas.
Medir el pliegue nucal no arroja un resultado definitivo, pero sí puede ayudar a una mujer a decidir si quiere hacerse otras pruebas como la biopsia de corión o la amniocentesis, pruebas invasiavas pero cuyo diagnóstico resulta mucho más ajustado (99% fiable).
En general, la prueba de la medición del pliegue nucal se realiza en combinación con otra prueba no invasiva, el triple screening: un análisis de sangre en el que se mide la presencia de una proteína y una hormona producidas por la placenta y el embrión. La combinación de estas dos pruebas permite detectar de forma precoz un riesgo mayor del normal de que un bebé tenga alguna alteración cromosómica, y también sirve, cuando da resultados muy bajos, para evitar amniocéntesis innecesarias.
Eso sí, siempre teniendo en cuenta que un 80% de los niños con defectos congénitos tiene un pliegue nucal más grueso de lo habitual (y por lo tanto hay un 20% en los que no se detecta) y que el 5% de los niños sanos presentan un pliegue nucal más grueso de lo normal. Esta prueba debe tomarse solo como una orientación, porque no da resultados definitivos.
Imagen vía: Fetaltest