La leche materna ayuda a regular el sueño del bebé, según han demostrado diversos estudios del sueño y la crononutrición, y que hasta ahora la única forma de regular el sueño de un bebé era a través de unos hábitos saludables.
La crononutrición se refiere a la elección de los alimentos que se ingieren en cada momento del día y de la noche, para contribuir a un correcto funcionamiento de los ritmos biológicos del organismo, como es el caso del ciclo sueño y vigilia.
La leche materna es la crononutrición más perfecta que existe porque este alimento varía su composición a lo largo del día para adaptar sus componentes a los diferentes ritmos biológicos de nuestro organismo de vigilia y sueño.
Así, observó que partir de las 18:00 horas en la leche materna se produce un aumento en la segregación de un aminoácido, el triptófano, que favorece la síntesis de la serotonina, produciendo una sensación de relajación que se eleva durante el periodo nocturno para favorecer el sueño.
Del mismo modo, los resultados de la investigación apuntan que las leches artificiales que integran diferentes componentes en función de la hora de la toma, imitando la materna, favorecen la regulación de los procesos de vigilia y sueño de una manera significativa.
El insomnio infantil afecta al 53% de los lactantes entre los 5 y 11 meses de vida, y se trata de un problema que puede ser determinante en las primeras etapas de la vida, pues los niños que han tenido problemas de sueño en el periodo lactante, tienen tres veces más problemas de insomnio a los cinco años.
El sueño además como ya se sabe afecta al desarrollo de los peques, ya que es durante ese tiempo cuando el organismo del niño experimenta una mayor actividad de crecimiento y desarrollo, se produce la reparación cerebral y la restauración del sistema inmunitario.