¿A quién de pequeñ@ no le dejabana meterse en la pizcina o el mar después de comer? ¿quién no recuerda eso de hay que esperar 2-3 horas?
Se suelen creer firmemente que después de haber comido, los niños (y los adultos) no pueden meterse en la piscina o en el mar, y cualquier tipo de chapuzón es peligroso, por eso se suele aconsejar que transcurra un tiempo, unas 2-3 horas antes de que el niño pueda meterse en el agua, para evitar un corte de digestión.
Un baño breve y templado no es peligroso. En cambio, la entrada brusca en el agua con un cambio extremo de temperatura corporal, así como tomar refrecos o helados muy fríos pueden causar un golpe de calor o síncope de hidrocución, lo que se conoce como corte de digestión.
Después de comer o merendar los niños pueden meterse en el agua pero con precaución, poco a poco, pero si ha comido mucho o el agua está muy fría, es mejor esperar un rato (unas 2 horas y media) para dejar al peque bañarse.
Lo más importante es evitar este cambio brusco de temperatura después de una exposición prolongada al sol, por eso hay que introducirse en el agua poco a poco, para que el cuerpo se adecue progresivamente a la bajada de temperatura.
También hay que tener en cuenta que los bebés se enfrían muy rápidamente, por eso el baño debe ser corto, no más de 10 minutos y al salir del agua lo mejor es secar rápidamente al peque, a menos que haga mucho calor.
Foto: flickr